Un gran avance tecnológico
Investigadores del equipo de Ted SARGENT en Canadá (MIT Microphotonics Lab y Nortel Networks) han diseñado un plástico que combina puntos cuánticos, que son semiconductores diminutos, con un polímero. Las nanopartículas resultantes, que miden entre los nanómetros 2 y 4, son capaces de capturar las altas longitudes de onda del espectro solar, como el infrarrojo.
Convierten la energía luminosa en electricidad con una eficiencia 5 veces superior a las células fotovoltaicas convencionales. De hecho, los paneles solares convencionales solo utilizan la mitad de la energía solar recibida y tienen un rendimiento limitado al 6%. El plástico solar del equipo de Ted SARGENT es capaz, al menos en el laboratorio y según el profesor Peter PEUMANS de la Universidad de Stanford, de una eficiencia del 30%.
Convierten la energía luminosa en electricidad con una eficiencia 5 veces superior a las células fotovoltaicas convencionales. De hecho, los paneles solares convencionales solo utilizan la mitad de la energía solar recibida y tienen un rendimiento limitado al 6%. El plástico solar del equipo de Ted SARGENT es capaz, al menos en el laboratorio y según el profesor Peter PEUMANS de la Universidad de Stanford, de una eficiencia del 30%.
¿Qué aplicaciones?
Entre las posibles aplicaciones es posible colocar las nanopartículas en pinturas o ropa y formar películas fotosensibles. Estas películas podrían cubrir una amplia variedad de superficies, como paredes o nuestras chaquetas. Estos serían capaces de cargar teléfonos, walkmans y esto sin ningún hijo.
Queda por verse si esta tecnología superará las barreras técnicas y financieras para la producción industrial a gran escala.
fuente: Notre-Planete.info